Las reacciones alérgicas a alimentos son muy comunes en todo el mundo: cerca de 520 millones de personas tienen alergias alimentarias según la Fundación Seguridad Alimentaria y Prevención de Alergias (FSA) y su incidencia, de hecho, no para de aumentar: ningún país ha reportado una disminución de este tipo de alergias en los últimos 10 años.
En España, más de dos millones de personas sufren algún tipo de alergia alimentaria. La incidencia es especialmente reseñable entre la población más joven: de los 17 millones de ciudadanos europeos afectados por alguna alergia alimentaria, 3,5 millones son menores de 25 años. El número de ingresos hospitalarios por reacciones alérgicas graves en niños, además, se ha incrementado un 7% en la última década.
La leche, los huevos, el trigo, los frutos secos, el marisco o la fruta son algunos de los alimentos que tienden a causar más reacciones entre la población, las cuales pueden variar en gravedad de acuerdo con quienes las padezcan. Las causas pueden ser diversas, al igual que los síntomas, si bien éstos suelen manifestarse provocando urticarias en la piel o afectando desde al aparato digestivo hasta al sistema respiratorio en los casos más severos (shock anafiláctico).
A continuación te contamos más sobre las alergias alimentarias y te damos las claves para que puedas diferenciarlas de las intolerancias alimentarias.
¿Cuáles son los síntomas más comunes de una alergia alimentaria?

Se entiende por alergia alimentaria a aquella reacción del sistema inmunitario que se da después de que se haya ingerido un determinado alimento. Aunque la respuesta normal del sistema inmunitario ante los alimentos es tolerarlos, hay casos en los que la ingesta de determinados alimentos provoca una reacción inmunitaria exagerada que desencadena en efectos nocivos y reacciones diversas.
Hormigueo y/o picor en la boca; urticaria, picazón o eccemas; hinchazón de lengua, garganta, labios u otras partes del cuerpo; congestión nasal y dificultades para respirar; dolor abdominal; diarrea y vómitos e incluso mareos, aturdimiento o desmayos son algunos de los signos y síntomas más frecuentes de una alergia alimentaria.
Aunque en la mayoría de casos las reacciones alimentarias son leves, en ocasiones las alergias pueden desencadenar un cuadro médico grave que requiere hospitalización urgente. Cuando se inflama la garganta y ello impide respirar, se estrechan las vías respiratorias, desciende la presión arterial y/o se pierde el conocimiento, podemos estar ante una anafilaxia, la reacción alérgica más grave de todas, cuya falta de tratamiento inmediato puede provocar un coma o incluso la muerte.
Causas y principales manifestaciones de las alergias alimentarias

Hablamos de alergias alimentarias cuando, tras la ingesta de un determinado alimento, se produce un fallo en la tolerancia inmunológica; el sistema inmunitario del organismo, encargado de luchar contra las infecciones, interpreta que dicho alimento es un invasor y reacciona entonces de manera desproporcionada, liberando sustancias químicas inflamatorias como la histamina, responsable de la aparición de la reacción alérgica y de sus síntomas.
Sobre el porqué de estos episodios, podemos encontrar entre las causas más frecuentes la carga genética de las personas, el estado de la barrera de la mucosa intestinal del afectado, la edad del mismo o bien la cantidad/forma de presentación del alimento digerido.
Las reacciones cutáneas como la urticaria son las manifestaciones de alergia alimentaria más frecuentes, si bien hay casos -los segundos más comunes, conocidos como síndrome de alergia oral- en los que las reacciones se producen en la mucosa oral y la faringe. El aparato digestivo también es uno de los grandes afectados por reacciones alimentarias; en estos casos hablamos de manifestaciones en forma de diarreas, dolores abdominales, vómitos y náuseas.
¿Cómo diferenciar la alergia alimentaria de la intolerancia alimentaria?

Dolores de barriga, náuseas, vómitos, ataques de tos o de asma, síntomas cutáneos como inflamación de labios o boca y eczemas… Los síntomas de las alergias y de las intolerancias alimentarias pueden ser muy similares, si bien no hablamos en ningún caso de lo mismo. Mientras que en las alergias alimentarias se produce un fallo del sistema inmunitario, en las intolerancias alimentarias es el sistema digestivo el que reacciona mal ante un alimento, no metabolizándolo correctamente.
La enfermedad celíaca o la intolerancia a la lactosa son las intolerancias alimentarias más frecuentes y, si bien pueden provocar la aparición de síntomas muy molestos, en ningún caso pueden ocasionar reacciones de riesgo fatal, como sí pueden hacerlo las alergias a ciertos alimentos. Sobre sus causas, algunas de las más frecuentes incluyen:
● ausencia de una enzima necesaria para digerir un alimento por completo
● síndrome del intestino irritable
● sensibilidad a los aditivos alimentarios
● celiaquía
Fuentes:
Kids health
https://kidshealth.org/es/parents/allergy-intolerance-esp.html
Allergy Therapeutics
Clínica Mayo